19.08.2014

Feria del LIbro de Marbella 2014

Información obtenida de la página web: http://anaevenegaseducadorasocial.blogspot.com.es/2014/08/sine-die-concierto-homenaje-agustin.html

 

Siguiendo con las jornadas homenaje al prolífico y heterodoxo Agustín García Calvo, anoche nuestros sentidos fueron agasajados con un delicioso concierto junto a la muralla árabe de Marbella, en plena plaza de la Encarnación, contraste de piedra y fachadas blancas, blanquísimas que dejan boquiabierto a todos los visitantes.

    En el ágora no cabía ni un alfiler, todas las sillas ocupadas y cientos de personas en pie, de donde no se movieron en la hora y media que duró el dispendio de sensibilidad que conformaban las letras de Agustín García Calvo y la música de la cultísima banda que ayer formaban Sine Die.


    Hubo un derroche de melodías jocundas y meditativas, surgiendo de instrumentos variopintos, flautas dulces, travesera, bajos, guitarras, Mandolina, Bouzouki,  Laúd y percusiones acopladas como una sola voz, para voz la prodigiosa casi trascendental de su intérprete femenina coreada por los músicos en algunas ocasiones.
  
     Me encontré rememorando paisajes medievales, renacentistas, árabes o incluso orientales pincelados con vientos de jazz, llevada de la mano de los ritmos supremos de los arreglos que los hermanos Fernández han hecho para la PALABRA de Agustín.

    Tengo que confesar que el talento del Filólogo-Filósofo-Poeta-Ensayista-Autordeteatroymás no desmerece la obra de Sine Die que realmente es virtuosa y el conjunto de ambas es manjar para el espíritu. Gracias a ambos por existir con conciencia.

Ana E.Venegas

 

 
A las diez de la noche y con una puntualidad inusitada en esto del artisteo, Amancio Prada materializó el último de los eventos de las “Jornadas Homenaje a Agustín García Calvo”, el entorno fue la espectacular Muralla Árabe de Marbella, frente a la Iglesia de la Encarnación, en un coso atestado de ávidos espectadores que esperaron hasta dos horas para coger una silla, con la esperanza de disfrutar en plenitud de la trascendental voz del virtuoso concertista.
 
 
     Reunidos todos, no cabía ni un alfiler, ni sentado ni en pie, ni en el suelo, todos, los seguidores de toda la vida, los visitantes de la ciudad, los amantes de la buena música, de la buena poesía, los apasionados de García Calvo, todos, pudimos gozar desde el primer punteo de esa guitarra que suena celestial, de una voz de otra dimensión, acompañados por un violonchelo prodigioso que mecía al espectador mientras morfeo era alejado por la necesidad imperiosa de estar consciente, para no perderse ni un segundo de tan extraordinario contexto.
 
     La Muralla de Marbella tiene una acústica espectacular, si además está adecuadamente iluminada, los naranjos adquieren presencia y la voz se trascendaliza, de forma y manera que los asistentes con una mínima sensibilidad y a poco que los músicos se inspiren, disfrutan de experiencias extracorpóreas, de gozo, de individualidad suprema, de alerta calma.
 

 

    En el caso de ayer tuvimos un extraordinario Amancio Prada que intercaló sus canciones con las anécdotas de su relación personal y creativa con el “Sabio”, como él mismo le llamó. Interpretó canciones propias inspiradas y musicalizadas del homenajeado y lo complementó con otras de Chicho Sánchez Ferlosio a quien Agustín tanto admiraba, y con letras de Rosalía de Castro o inspiradas en ella y Federico García Lorca. Estuvo soberbio, se notaba que estaba disfrutando del sonido, de la silenciosa y expectante concurrencia y de todos los amigos y familiares de García Calvo que habían convergido en tan emocionante acontecimiento artístico-cultural. 
 

Información recogida de la página web : 


http://anaevenegaseducadorasocial.blogspot.com.es/2014/08/agusti-garcia-calvo-homenajeado-por.html

Ayer tarde noche nos reunimos en el incomparable marco del Hospital Real de la Misericordia para saborear el homenaje que Paco Fernández, la mitad de Sine Die, perpetró a favor de la figura y obra de Agustín García Calvo, el homenaje se completará con dos conciertos en la muralla, esta noche el de Sine Die y mañana el de Amancio Prada, ambos proyectando la palabra del festejado intelectual.

     Numerosos conocidos de las letras, amantes de la cultura y autoridades acudieron a rendir un homenaje al trabajador constante, enamorado de la palabra y autor prolífico. El edificio nos proporcionó un ambiente mágico que se llenó de las palabras del propio Agustín declamando su poesía, gracias a las ventajas de las nuevas tecnologías. Su voz resonó en las paredes del atrio central mientras nos acunaba su ritmo y su rima, en la más apoteósica fusión de la lírica latina y anglosajona.

    El ponente tenía una tarea complicada pues el “talento” publicó durante su vida más de cien obras, pero Paco FErnández supo estructurar el encuentro entre la faceta de filólogo, de filósofo, poeta, dramaturgo, ensayista, traductor y de intelectual comprometido socialmente. Todas estas vertientes de su obra se encontraban en su pensamiento productor, de forma que si él reflexionaba sobre la palabra no dejaba pasar la ocasión para estudiar las connotaciones que el uso u abuso de ellas hacemos los hombres, para buscar la diferencia y por tanto la superioridad, para  adoctrinarnos, con frases hechas que suponen verdades como puños, con respuestas preparadas que cierran las preguntas y nos impiden progresar en el pensamiento.

    Agustín produjo una obra demoledora, literalmente, cimbreando los cimientos de las verdades absolutas, se atrevió a meterse con las matemáticas y la física, demostrando que el ser crítico te hace libre, te lleva a la situación de poner todo en cuarentena de manera que a través de la búsqueda de la verdad, vayamos abriendo horizontes que deben ser cada vez más amplios, si no queremos caer en el dogmatismo excluyente.

    Paco hizo un repaso a su obra Filológica con mención especial a sus tratados de Gramática y Prosodia así como su investigación sobre el aparato del lenguaje, que incluye más que el aparato fonador, ahí nos adentramos en su visión choskiana. Mencionó sus obras filosóficas muchas de ellas con fuente en los presocráticos que le fascinaban por su simpleza. Y nos dejó perplejos ante las obras traducidas por el homenajeado: Macbeth o los Sonetos de Shakespeare, clásicos griegos como Aristófanes, Platón, Virgilio…

     Ensayos, traducciones corrigiendo a los anteriores traductores, obras de pensamiento político… en fin que sólo podemos admirar a esta persona que trabajó toda su vida, a la que admiro por su poder de concentración y clarividencia y que nos dejó una obra que confieso no puedo abarcar a no ser que me dedicara exclusivamente a ella. Era tan perseverante que se obligó a escribir un poema cada día, menuda disciplina autoimpuesta, qué pena que al morir no pueda quedar esa mente como base de datos, menos mal que nos dejó su obra.

    Por último, Sine Die, puso el colofón al acto, Paco Fernánez declamó versos de Agustín mientras las notas de Green Leaves y otras sonatas llenaban cada rincón merced a un instrumento de cuerda de sonido y aspecto medieval, Agustín puede estar tranquilo, sus palabras, como debe ser, están hablándose en voz alta.